23 de mayo de 2011

Conversación sobre claroscuros del movimiento 15-M entre dos amigos anarquistas

Kiko y Javier son dos amigos anarquistas de toda la vida (lo de amigos y lo de anarquistas). En el día de ayer se encontraron por la calle de una ciudad cualquiera y comenzaron a charlar de lo que está ocurriendo sobre el 15-M.

Kiko: ¡Hombre compañero! ¿No te he visto estos días en la movida de la plaza? Ayer estábamos allí unas 1000 personas, en una asamblea, la gente quejándose de los banqueros, los políticos, el paro, proponiendo cosas, muy dispersas todavía, pero de algún modo era esperanzador ver como la gente se puede organizar de una manera más espontánea que la que nos han tratado de inculcar toda la vida.

Javier: Pues no, no he ido tío. Y te explico: a mí me parece bien que la gente proteste y se queje, pero soy bastante crítico y escéptico con este movimiento, porque me planteo, después de haber leído y visto muchas cosas al respeto que:

¿Por qué hasta las elecciones municipales?, ¿Por qué los medios y los partidos están a favor de ese movimiento? El PSOE, IU y hasta sectores del PP están de acuerdo, parece que no se dan por aludidos. ¿Por qué esa obsesión por ser apolíticos y únicamente tachar a PP, PSOE y CIU como culpables? Las suspicacias de intereses de otros partidos como UPyD, IU o Ciudadanos que quieren hacerse un  hueco parecen justificadas. ¿Por qué esa otra obsesión en negar que promuevan la abstención? ¿Qué malo hay en promover la abstención si el problema está en el propio sistema? Quizá sea que muchos no piensen así y cambiar el sistema "democrático" actual da vértigo. ¿Qué clase de gran reivindicación (al menos la que se hace popular en los medios) es que cambien la ley electoral? Eso, de forma descarada apoya los intereses de los partidos que te acabo de decir.

Yo creo que el problema de fondo es que no hay ataques directos contra las fuentes de riqueza. Los trabajadores no están involucrados, no hay parones de producción, no hay huelgas, no hay protestas fuertes, así sólo se consigue levantar polvo, los caminos a seguir lo marcaron Grecia y Francia. Estas sentadas a lo “cumbayá” es un propio escape para que la gente grite un rato y se vaya a su casa y todo siga igual. Incluso los políticos salen hablando diciendo que les apoyan, ¿qué les apoyan? ¿Cómo coño los van a apoyar si deberían estar cagados de miedo?

Esto en muchos casos se está convirtiendo en mercadillos, con puestos para vender pulseras de cuero, papelitos pegados en paredes, como si fuera una dinámica de catequesis y por supuesto las batucadas de turno que nunca pueden faltar.

¿Qué clase de revolución es que cambien la ley electoral? Ya se les pone nombre y apellidos a los intereses de quienes impulsaron el #nolesvotes y ahora el DRY: intereses en el mercado (Enrique Dans), en la “nueva política” (Carlos Martínez, UPyD, Víctor Domingo, Ciudadanos y presidente de la Asociación de Internautas) o de los nuevos modelos de comunicación (Ricardo Galli de Menéame).

Mira, no creo que sea algo malo del todo y en parte creo que hay que apoyarlos. No es que sea un “tocapelotas” pesimista, que como dije al principio me parece perfecto las reivindicaciones para hacer un poco de conciencia, pero creo que con lemas sacados de Los Simpsons, sin atacar al propio sistema capitalista y sin cambiar las conductas consumistas, por muy hippie que se sea y por mucho que te reviente los huevos todo, en un rato te vas para tu casa y mañana estás comprando ropa en el Pull&Bear, comiendo en el McDonald y charlando con los colegas como si tal cosa de que casi cambiaste el mundo.

Yo creo que hay que atacar donde duele, primero, huelga general indefinida, segundo, organización política y sindical desde la autogestión y tercero, lucha ante las fuentes de poder y riqueza.

Kiko: A ver Javi, evidentemente, el movimiento es muy heterogéneo y tiene muchas cabezas y mucha gente intentando meter la mano detrás.

Por lo que yo he visto, en la asamblea la gente estaba pidiendo que el movimiento no acabase el día de las elecciones, sino que siguiese, y la gente que estaba allí parecía estar de acuerdo en que esto no podía ser flor de un día, sino que hay que seguir hasta cambiar (de una manera reformista en el fondo, eso hay que admitirlo) el sistema.

Dentro de la gente que estaba allí ayer había anarquistas, comunistas, parados, etc, etc. Va a ser muy difícil, por no decir imposible, que un grupo así saque una conclusión común. Vas allí, hablas de si vamos a hacer una manifestación tal día, si se va a seguir con una serie de criterios comunes, pero no vas a conseguir que todo el mundo no vote, o vote a un partido determinado.

Sí es cierto que hay una mayor crispación, universal casi, con el PP y el PSOE, por motivos más que evidentes, pero ten por seguro que por lo menos aquí no había ayer gente con pinta de votar a UPyD.

Yo creo que no sólo son los #nolesvotes, hay más gente detrás. Ayer estaba gente allí de la CNT y la CGT y uno de ellos dio un discurso bastante antiparlamentarista. Ese evidentemente no va a votar, creo yo. No obstante, la idea general del movimiento es que se asuman cambios sociales y políticos dentro del propio régimen democrático burgués, eso es así tal y cual está planteado ahora.

No hay que engañarse, porque el movimiento no es un movimiento revolucionario ni de aquí va a salir una revolución social, a menos que la cosa evolucione mucho. Lo de cambiar la ley electoral, para mi, es algo que tiene mucho sentido, en tanto que el propio sistema democrático está ponderando los votos ayudando ampliamente a los partidos nacionalistas burgueses, CiU y PNV, mientras que alternativas dispersas de izquierda están subrepresentadas en el parlamento, por ejemplo IU. Es normal que la gente de izquierda que vote a izquierda unida esté hasta el carajo de que 7 votos suyos cuenten como 1 de alguien que vota al PNV.

Está claro que el movimiento, para ser un movimiento coherente debe adquirir una clara conciencia de ser un movimiento de clase, dejarse de ambigüedades y pedir cosas por y para la clase obrera. Pero esto empieza a burbujear ahora. Si desaparece, pues se fue y todo sigue igual. Si funciona bien y la gente involucrada lo dirige hacia los lugares correctos, llegará el momento de que pueda crecer, plantear paros, etc, etc.

Tu propuesta me parece cojonuda. Si quieres ahora vamos a la asamblea y se la cuentas a la gente, mamón.

Javier: Claro joder, y luego vamos al ayuntamiento a la sesión de sugerencias y ya que estamos a confesarme a un cura y a escribirles una carta a los reyes magos… total, el efecto será el mismo. Mira, si quieres, mejor vamos a una asamblea general de UGT y les proponemos hacer una huelga general indefinida. Probablemente me peguen una paliza o se rían de mí.

Yo he leído muy bien sus propuestas (http://estrecho.indymedia.org/sites/default/files/Propuestas_una_pagina.pdf). Muchas son buenas ideas, no lo dudo, al igual que la mayoría de programas electorales de cualquier partido político. El problema está en que en ningún momento ponen en duda el propio sistema capitalista ni la democracia burguesa representativa. ¿De verdad crees que en una iniciativa basada en valores capitalistas y continuistas tendría acogida plantear una huelga general indefinida? ¿Tendría sentido ir a Comisiones Obreras y decirles que se hagan anarquistas, por ejemplo?

El trabajo por la revolución es complejo y debe abarcar todos los frentes. Demanda tiempo, demanda dinero, demanda compromiso. No pongo en duda que cualquiera que haya pasado una noche haciendo el botellón en una plaza ya haya hecho más que yo, pero parto de la base de que al mismo Durruti se le discutió su proceder anarquista. En palabras de F. Nietzsche: "Este es mi camino, ¿dónde está el vuestro? Así respondía yo a los que me preguntaban por el camino."

Kiko: Nada más lejos de mi intención juzgar a nadie su carácter revolucionario ni su activismo, y menos a ti. Ser coherente, no ser sectario, ser solidario, etc, etc, es un juego de malabares y cualquier listo puede sacar faltas sin tener ni puta idea.

Entiendo lo que dices, y que los de DRY, a priori, han rechazado muy escrupulosamente señalar el capital, los empresarios, la democracia parlamentaria, etc, como los problemas que hay que erradicar para que la cosa funcione. Esto responde, asumo yo, a un interés de atraer a la gente, porque si dices proletariado o capitalismo la gente se asusta, y porque realmente no existe la fuerza real para plantear otra cosa. Y si existiese, a lo mejor los de DRY no pintaban nada ahí.

Pero el tema es que, por lo que he podido ver, es que allí se estaba señalando a los bancos como los culpables, se hablaba de los problemas del capitalismo, etc. Evidentemente, el movimiento, al carecer de una uniformidad aquí dice una cosa, en Sevilla otra y en Madrid otra, porque depende de la gente que esté allí hablando lo que se haga.

Hay un componente obrero importante, así como un componente pequeño burgués también revoloteando alrededor. Como te dije antes, estas concentraciones tiene sus contrapuntos negativos y muy posiblemente todo esto se disuelva en la nada, pero el mero hecho de existir demuestra que no estamos tan dormidos como podríamos pensar y que llegado el momento (imagina lo mismo después de 4 años de PP campando a sus anchas), pueden surgir cosas muy positivas.

Ante esto ¿Son anticapitalistas? ¿Son anarquistas? ¿Son comunistas? pues parece que cada uno es de su madre y de su padre y que todo el movimiento se va a encauzar hacia la reforma del sistema actual, es decir, como creo que leí ayer lo que es “la reconquista del Estado del Bienestar perdido”. ¿Es esto positivo? Yo creo que sí. Aunque seamos anarquistas, nos interesa una mejora en las condiciones objetivas actuales ¿no? Las revoluciones (cada vez que leo spanish revolution “me pongo” antes de recordarme que se están magnificando las cosas) no son cosa de dos días. Las protestas de este tipo, en un estado tan embrionario, no sabemos como pueden salir ni si tendrán algún efecto real, pero yo las considero positivamente, aunque sea solo como ensayo y demostración de que el pueblo tiene inquietudes y si se organiza, aunque sea de un modo tan "espontáneo" y heterodoxo, puede poner nerviosas a ciertas personas.

Si vas allí y expones lo de la huelga general indefinida y demás, no creo que vayas a conseguir que la gente se ponga en huelga general, pero no te van a tirar piedras ni nada. Y hasta aplaudirán.

Javier: No sé si lo que quieres decir es la unión de reformas hace una revolución si es así, entonces no existen las revoluciones ¿no?, bueno sí, pero entendidas como metareformas. Entonces ya no sería revolucionario, sería “metareformista”...

Kiko: No, noooo, no quiero decir que una unión de reformas haga una revolución ni mucho menos. Las revoluciones son lo que son. Porque reformistamente se puede conseguir hasta donde los que estén en el poder te dejen por las buenas. Si no, mira a UGT y CCOO como les va siendo reformistas. Y está muy feo quedarse en medias tintas. Si quieres cambiar las cosas de verdad, revolución. Además, ¿qué carajo es metareformismo? ¿Un pokemon?

Javier: Jajaja, bueno, como sabemos, revolución en España, hasta ahora, sólo ha habido una: la revolución social del 36 y que precisamente aplastaron la burguesía republicana y los comunistas del PSUC.

Esto no es una revolución, pero ojalá, y ahí estoy contigo, sea el primer paso para una. Aunque queda, bajo mi punto de vista, muchos escalones por subir.

Bueno compañero, te dejo que no llego al curro. Ya seguimos hablando e intento acercarme esta tarde a la plaza ¿ok? ¡Salud!

Kiko: ¡Salud compañero!

Publicado en: Portal Libertario OACA e Indymedia Barcelona